¿Qué será lo que le ponía su madre cada año en el armario que le daba tanto miedo?
En su estrecho y oscuro cuarto el pequeño Marquitos no podía descansar. Miraba de reojo la puerta entreabierta y se arrebujaba entre las sábanas, inquieto. Tiraba tanto de ellas que hasta sentía los pies fríos. En ocasiones, el terror le paralizaba los músculos del cuerpo y, entonces, se decía a sí mismo que no dejaría pasar otro año más sin atreverse a mirar dentro.
Hoy, por fin, el pequeño Marquitos se ha armado de valor y se ha levantado. Desliza sus deditos huesudos entre la rendija y tira con todas sus fuerzas. Al otro lado, junto a su nombre y la fecha de su cumpleaños, tan solo descubre un ramillete de flores marchitas, tan inertes y descoloridas como él.
Hola Jean,
Buen relato. El engaño y despiste de la primera parte, nos deja un pastel bastante inquietante. Me ha gustado mucho. Vengo de la mano del Tintero de Oro, ya me dejaste tu comentario en El Rincón de Keren, siento no haber comentado antes.
¡Un gran saludo!
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Escueto relato con contundente final que sorprende y nos deja impactados.
Te deseo suerte compañero.
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Muchas gracias, Francisco. Me alegro de que te haya gustado.
Un abrazo.
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Hola, Jean, un buen micro en el que engañas un poquito al lector y lo llevas por donde tú quieres, pero en el que consigues una buena sorpresa final. Suerte en el concurso. Abrazos.
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Gracias, María del Mar, por pasarte y comentar.
No es tarea fácil llevar al lector por donde uno quiere. Me alegro de que te haya gustado.
Un abrazo.
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¡Hola!
Me ha gustado mucho, y como creo que a todos nos ayudan las sugerencias de mejora, te comento dos minucias:
-La expresión «pequeño Marquitos» creo que debería ser o Marquitos o «pequeño Marcos «, porque provoca efecto redundante.
-El armario despista, a no ser que lo cambies por puerta. Sé que es un símil con el ataúd pero me llevó a pensar en una ubicación que luego no coincidía. Ay, qué mal me explico.
Dicho lo anterior la idea es fantástica y tu prosa, impecable. El resto son minucias para redondear un micro redondo.
Muchísima suerte.
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Muchísimas gracias por tus aportaciones. Siempre son bienvenidas.
La redundancia era un poco a propósito para enfatizar lo pequeño que era el protagonista. Que se viera bien que era un niño.
Lo del armario sí que puede parecer un poco forzado. Aunque no es el ataúd sino la lápida. Al menos así me lo he imaginado yo, jejeje, (la mente de cada uno)
Un abrazo.
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Un relato que desconcierta al lector, y el final es demoledor.
Pocas palabras pero mucho contenido . El refrán se cumple,» si breve dos veces bueno»
Suerte en el concurso.
Un abrazo Jean
Puri
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Muchas gracias por apreciar la contención.
Me alegro que te haya gustado.
Un abrazo.
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Realmente estremecedor y sorprendente. Buen micro.
Un saludo
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Muchas gracias, David, por pasarte y comentar.
Me alegro que te haya gustado.
Un abrazo.
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Un gusto pasar, leer y disfrutar. Buena suerte en lo de David. Nos vemos 😉
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Gracias, Vivian, por pasar y dejar tu comentario.
Me alegro que te haya gustado.
Un abrazo.
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Buen micro, me has dejado con una sensación de miedo por lo que está pasando y de cierta pena por ese pobre niño desconcertado.
Mucha suerte en el concurso
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Hola Conxita.
Si te he generado tantas sensaciones creo que es un buen síntoma de que no he hecho tan mal trabajo.
Me alegro que te haya gustado.
Un abrazo.
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Buen relato. Deja buen sabor de boca. Trabajado con los elementos justos. Me gusta. Espero que el buen hacer se refleje en los puntos concedidos. Saludos
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Don Kendall… viniendo de ti es todo un elogio.
Ahora no sé qué decir…
Muchas gracias.
Un abrazo.
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Un micro que me dejó sin habla. En lo particular me gustan muchos los micros… pero no tengo tus tablas.
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Hola Lola.
Me alegro haberte dejado muda. Eso significa que no lo he hecho tan mal ;).
No te apures, las tablas se van aquiriendo con el tiempo. A mí aún me quedan unas cuantas si quiero mantenerme a flote, jeejeje.
Un abrazo, amiga.
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Hola, compañero en éste y otros eventos… Te ha quedado un micro impactante, muy bien escrito, redondo gracias a ese sorprendente final; gracias por tan exquisito regalo.
¡Enhorabuena! Te deseo mucha suerte en el concurso.
Un abrazo.
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Hola Patxi.
Muchas gracias por tus amables palabras. Que lo consideres un regalo ya es suficiente premio para mí.
Un abrazo.
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¡Muy buen relato Jean! Un micro que deja al lector desarmado. Una mezcla de misterio y tristeza..
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Hola Mirta.
Me alegro haberte desarmado. Conseguir sensaciones en el lector me parece cosa difícil.
Un abrazo.
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Menudo micro, y nunca mejor dicho…Al menos recordaba su aniversario.
Suerte en el sorteo, Jean Ives.
Un saludo
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Gracias por tu paso, Chelo. me alegro de que te haya gustado.
Un abrazo.
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Un micro muy enigmático y con un final muy abierto. El lenguaje nos envuelve en un ambiente misterioso y un tanto tétrico.
Mucha suerte con este buen micro.
Un beso.
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Hola Rosa.
La ambientación es fundamental en algo tan pequeño, así que me alegro de haberte provocado esas sensaciones.
Un abrazo.
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Hola Jean. Adoro los micros porque la dificultad que presentar al momento de escribirlos, porque deben contar con las claves necesarias para que se nos abra un mundo de sensaciones y posibilidades. Como siempre digo dicen más de lo que está escrito.
Un abrazo y mucha suerte en el concurso.
Ariel
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Hola Ariel.
Me alegro de que te haya gustado. Coincido contigo al 100%. Son muy complicados, al menos para mí.
Un abrazo.
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Qué buen micro, Jean. Es difícil provocar tantas emociones en el lector con un número tan escaso de palabras, pero tú lo has logrado. Pobre crío, si al principio temíamos con él y sentíamos curiosidad por saber qué había en ese armario, al final no podemos evitar la tristeza.
¡Un abrazo y mucha suerte en el concurso!
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Hola Julia.
Me alegro de que te haya gustado. Es muy difícil hacer un micro. Al menos a mí me cuesta mucho. Así que saber que te he provocado las sensaciones que había planeado me llena de orgullo.
Un abrazo.
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No se puede ser más contundente y suscinto. Así, sin más… nos lleva a la situación última que da escalofríos y también un poquito de pena por el desconcierto y la soledad del niño.
Muy bien Jean.
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Estoy contigo, Tirma. El pobre Marquitos estaba muy solo y también muy asustado. Sus terrores nocturnos se transformaron en una realidades contundente.
Un abrazo.
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Un relato muy desconcertante, enhorabuena porque ahora me deja pensando en muchas cosas de esa madre. Deja con ganas de más.
Saludos
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Me alegro de haberte desconcertado y de dejarte pensando. Es de lo que se trata, ¿verdad?
Un abrazo.
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Uffff Jean. Me has puesto los pelos de punta.
Buen microrrelato. Mucha suerte.
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Me alegro de haberte estremecido. Ya se sabe que un relato que provoca sensaciones al lector es un buen relato. Creo que misión cumplida, ¿no? jejeje.
Un abrazo.
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Un triste pero tierno cuento. Ojalá Marquitos se hubiera atrevido a abrir el armario antes.
Un abrazo.
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Gracias Josep. Me alegro de que te haya gustado.
Un abrazo.
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Impactante e inesperado ese final. Muy bueno,
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Gracias, Marta. Me alegro de que te haya gustado.
Un abrazo.
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Oh, qué pena ese final.
Pero que conseguido está el micro porque para nada es lo que uno espera.
Un abrazo.
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Gracias, Irene por pasar y comentar. Me alegro de que te haya gustado. La sorpresa final es algo con lo que he jugado para romper las emociones creadas al principio.
Un abrazo.
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Un estupendo micro Jean, que nos deja un revoltijo de emociones desde el miedo a la tristeza. Es muy difícil escribir una historia redonda con tantos condicionantes como los de este concurso, pero lo has conseguido de sobra. Un abrazo!
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Gracias, David. Viniendo de ti es todo un elogio. Aún anda rondando por mi cabeza tu princesa.
Un abrazo.
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Me has engañado, y no es cosa fácil.
Felicidades, buen final.
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No sabes como me alegro, jejeje.
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